Si bien cada vez son más los países y empresas que se han unido para prometer la neutralidad de sus emisiones de carbono para el año 2050, lograrlo requiere más que buena voluntad. Uno de esos esfuerzos para acelerar el cambio está en camino.
De acuerdo con Edie, a principios de octubre de 2022, el Instituto para el Liderazgo en Sostenibilidad (CISL) de la Universidad de Cambridge lanzó el informe Net-Zero Business Transformation (2022). El cual describe cómo los líderes empresariales deberán cambiar su mentalidad para garantizar que la transición hacia las bajas emisiones de carbono no sea un trabajo aislado, sino el punto central empresarial para el cambio.
Net-Zero Business Transformation
CISL reveló que el informe tardó 12 meses en elaborarse con la contribución de 30 organizaciones en una variedad de sectores importantes. Entre las empresas participantes se incluyeron Ikea, Croda, Dentsu International, Majid Al Futtaim Group, Royal DSM, Rolls-Royce, Hewlett-Packard, Iberdrola, Signify, Spotify, Salesforce, Holcim, Carrefour y Vattenfall.
El informe propone un marco de cinco pasos, siendo el primero «establecer una agenda transformadora». La propuesta menciona que tanto los objetivos como la visión que se propongan deben ser lo suficientemente ambiciosos como para que la empresa necesite «romper el statu quo» para cumplirlos. Por lo tanto, deben establecerse públicamente para que la empresa no se retracte de ellos y para que los grupos de partes interesadas clave, como socios y accionistas, puedan hacer preguntas sobre ellos.
Luego, las empresas deben crear las condiciones propicias para la transformación necesaria para cumplir con sus visiones y objetivos declarados. Es posible que necesiten también mejorar la gobernanza, es decir, el sistema que proporciona un marco para la gestión de las organizaciones y crear una cultura empresarial favorable. Además, es posible que deban reconsiderar si sus asociaciones y trabajo de promoción —ya sea solos o a través de organizaciones de miembros— sirven al cumplimiento de su visión. Asimismo, deberán evaluar sus planes financieros y de innovación, y su enfoque de las habilidades.
De esta manera, las empresas pueden aprovechar adecuadamente las oportunidades de la transición y desempeñar un papel clave en su impulso, dentro y más allá de sus cadenas de valor y sectores respectivos.
Apostar por la innovación
En cuanto a la innovación, específicamente, el Net-Zero Business Transformation recomienda que las empresas adopten un enfoque de «cartera», apoyando diversas tecnologías y caminos que probablemente se volverán viables a lo largo de diferentes plazos. Se desaconseja la búsqueda y adopción de una sola solución definitiva para resolver un problema.
El informe argumenta que las grandes empresas tienen la responsabilidad de incorporar las innovaciones, yendo más allá de las intervenciones de tiempo limitado en un punto del proceso de desarrollo.
En este contexto, a medida que avanza la transformación empresarial, los líderes deben adoptar un enfoque centrado en las partes interesadas, considerando cómo sus acciones pueden generar riesgos y oportunidades para diferentes grupos, asumiendo la responsabilidad de gestionar esto. Aunado a ello está la necesidad de medir, divulgar y reducir los riesgos físicos y de transición de manera equitativa.
Empresas deben identificar áreas prioritarias de transformación
Más allá de un marco de cinco pasos, el informe proporciona una lista de verificación para las empresas que buscan identificar sus áreas prioritarias de acción en función de identificar y priorizar los temas ambientales, sociales o de gobierno corporativo más «materiales» (o importantes) para los grupos de interés y la organización, así como su capacidad para cambiar los sistemas a través de su esfera de influencia. También viene con siete estudios de caso de empresas que ya están trabajando para implementar el marco.
El prólogo del informe está escrito por la codirectora ejecutiva de la multinacional holandesa Royal DSM, Geraldine Matchett, quien escribe: «Nuestro consumo imprudente de recursos ha excedido durante demasiado tiempo la capacidad de nuestro planeta, incluso cuando seguimos sin satisfacer las necesidades de las personas, en muchos maneras y muchos lugares».
Además, señaló la urgencia de que las empresas tomen medidas drásticas para remodelar la forma en que vivimos y trabajamos actualmente. De seguir al paso que vamos, las acciones se volverán irreversibles y causarán un daño catastrófico para el planeta y su capacidad de abastecer a una población en rápido crecimiento.
«Un número creciente de empresas entiende su papel en una sociedad sostenible y reconoce sus responsabilidades ante un amplio espectro de partes interesadas; sin embargo, si bien el destino neto cero es claro, la ruta para alcanzarlo es más turbia».
Geraldine Matchett, codirectora de Royal DSM.
Credibilidad y liderazgo empresarial
Un análisis reciente que utiliza datos del Net-Zero Tracker —un inventario que evalúa el estado y las tendencias del establecimiento de objetivos netos cero en países, gobiernos subnacionales y empresas— encontró que, si bien los objetivos de cero neto ahora cubren la mayor parte de la economía global, los esfuerzos para mejorar su credibilidad han sido lentos y mínimos hasta la fecha.
A partir de junio, más de un tercio (702) de las empresas más grandes del mundo que cotizan en bolsa habían establecido objetivos públicos netos cero. Esto fue más del doble de la cantidad de empresas que lo hicieron en junio de 2020 o antes.
Sin embargo, solo la mitad de estas empresas han integrado datos sobre estos objetivos en los informes y documentos anuales. Poco más de un tercio (35%) tenía objetivos que cumplían con los criterios mínimos de Race to Zero, una campaña lanzada por la ONU para unificar y aumentar la acción climática a nivel global. Vale la pena señalar que estos criterios se han estado elevando, lo que significa que una proporción aún menor de estas empresas alcanzará sus objetivos establecidos.
