¿Qué es un reporte de sustentabilidad y cómo se realiza?

Dar a conocer los esfuerzos de una organización en materia de sustentabilidad es una de las mejores estrategias para mantenerse a flote en el mercado global de la actualidad. Esto porque los consumidores son cada vez más conscientes del impacto que generan el consumo y la producción de artículos de uso común. Y toda esa información pueden encontrarla sintetizada en lo que es un reporte de sustentabilidad.

Las empresas que emiten este tipo de documentos generan mucha más confianza a sus partes interesadas o también conocidos como stakeholders, lo cual hace que se posicionen entre las preferencias de la población y mejoren su reputación corporativa. Si tu compañía también quiere ser parte de este grupo, aquí te presentamos una pequeña guía para hacerlo.

¿Qué es un reporte de sustentabilidad?

El reporte de sustentabilidad es un documento informativo a través del cual las empresas comunican su desempeño en los aspectos ambientales, sociales y de gestión interna de forma puntual y objetiva, abarcando un periodo específico. Asimismo, se integran los aspectos fundamentales del sector y se puede especificar la estrategia de sustentabilidad que se sigue y el alcance de los logros de la misma.

Cada uno de los elementos que integran este informe debe ser verificable y comparable con el proceso evolutivo de la empresa y el de sus pares. Debido a ello, estos datos se convierten en una herramienta estratégica que ayuda a la empresa a medir su desempeño y facilita el proceso de mejora continua.

Previo a la publicación de este documento se debe realizar una auditoría de RSE, en la que se analicen y evalúen las operaciones de la compañía, así como la ética y la manera de actuar de los miembros de la misma. Por lo tanto, la parte final de este proceso es lo que es un reporte de sustentabilidad, ya que contiene las conclusiones, los logros y los objetivos de la empresa en cuestión.

¿Cómo realizarlo?

Aunque el formato GRI es el más común, existen muchas metodologías y estándares desarrollados por organizaciones internacionales que, si bien no son obligatorias, funcionan como guías para elaborar lo que es un reporte de sustentabilidad. El cual deberá reportar de forma balanceada el desarrollo de la sustentabilidad en la empresa a partir de los tres ejes mencionados con anterioridad. Algunos de estos formatos son:

• GRI: Se centra en los Indicadores de Desempeño definidos por el Marco para la Elaboración de Memorias de Sostenibilidad de la Global Reporting Initiative, diseñado para ser utilizado por organizaciones de cualquier tamaño, sector y localización.
• Comunicación sobre el Progreso (CoP): Se basa en los 10 principios del Pacto Mundial, los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y el Acuerdo de París. Las empresas pertenecientes a esta iniciativa tienen el compromiso de reportar su avance de manera anual.
• ISO 26000: Es una guía internacional que analiza 7 áreas fundamentales que van desde la organización interna, hasta el papel de la empresa en el desarrollo de la comunidad. A diferencia de otras normas ISO, esta no es certificable.
• AA1000: El Institute of Social and Ethical Accountability desarrolló esta norma para promover certeza sobre la responsabilidad social de la empresa. Está formada por documentos orientados a mejorar el desempeño sustentable de las organizaciones, basándose en el diálogo con los stakeholders.
• OCDE: La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos publica una serie de recomendaciones, hechas para empresas multinacionales por los gobiernos de países que la conforman, a manera de principios voluntarios para operar dentro de su territorio.

Estructura de una memoria de sustentabilidad

El contenido básico de un reporte de sustentabilidad que toma como guía los principios de la Global Reporting Initiative (GRI) debe considerar que hay tres tipos de estándares:

1. Universales: Se aplican sin excepción.
2. Sectoriales: Dependen del sector industrial.
3. Temáticos: Sirven para presentar información específica de algunos temas.

Si se quiere publicar un informe basado en este formato, se debe cumplir con los requerimientos de conformidad. En primer lugar, se debe considerar que la descripción de los datos incluidos en el documento debe ser precisa, equilibrada, clara, comparable, exhaustiva, puntual y verificable. Lo cual es importante porque se debe informar, sin omisión, lo siguiente:

• Detalles organizativos.
• Entidades incluidas en la elaboración del informe.
• Periodo objeto del informe, frecuencia y punto de contacto.
• Reexpresiones de información.
• Verificación externa.

Los detalles de esta información, se encuentran en el GRI 2: Contenidos generales. Y, para determinar los temas materiales específicos que se desea incluir, se puede consultar el GRI 3: Temas Materiales. Además, es necesario notificar a la GRI para la aprobación del documento y que se permita su publicación, después de incluir todo lo requerido en los estándares universales, sectoriales y temáticos, según sea el caso.

Por otro lado, en 2021, GRI lanzó las nuevas directrices para estándares universales que definen lo que es un reporte de sustentabilidad. Estas actualización son aplicables desde el 1 de enero de 2023. En ellos se contemplan nuevos indicadores sobre la detección, adquisición y manejo de riesgos de proveedores en términos de impacto ambiental, prácticas laborales, derechos humanos e impacto social, así como mayor extensión en indicadores de energía y más énfasis en información sobre gestión de sustentabilidad.

La importancia de reportar

Tanto las auditorías en RSE como la publicación de resultados ayudan a las empresas a evaluar a tiempo los procesos que conllevan un daño potencial, permitiendo anticiparse a las posibles implicaciones, reduciendo costos en el control de calidad y aumentando la eficiencia en la producción.

Además, comunicar de manera precisa los aspectos ambientales, sociales y económicos de la empresa, permite una gestión más eficiente de la información al generar transparencia y credibilidad. Asimismo, el reporte de sustentabilidad es una herramienta para abrir canales de interacción entre la empresa, su cadena de valor y sus grupos de interés, para cimentar su compromiso social e identificar sus áreas de oportunidad.

Por lo tanto, este documento constituye un elemento importante que agrega valor a la reputación corporativa y contribuye de forma integral en la comunicación de la responsabilidad social de la empresa, convirtiéndose así en una ventaja competitiva. Puesto que los datos contenidos en él son comprobables y sencillos de entender.