El 2022 es el segundo año de la última década que tenemos para resolver el cambio climático. Los científicos son unánimes al afirmar que debemos reducir a la mitad las emisiones mundiales de carbono de aquí a 2030 para tener una oportunidad de evitar los peores impactos del cambio climático.
De acuerdo con GreenBiz, para lograr un futuro sin emisiones de carbono, las empresas deben liderar el camino, ya que son las que toman las decisiones —en materia de energía, transporte, fabricación, agricultura y demás— que determinan la cantidad de CO2 que llega a la atmósfera.
4 acciones en favor de lucha climática en 2022
Dadas las condiciones actuales, este año podría ser el punto de inflexión en el que los gráficos climáticos de las corporaciones se inclinen hacia el cero al ritmo que exige la ciencia. He aquí algunos cambios importantes que se cree que veremos este año:
1. La eliminación de carbono se convertirá en una categoría distinta de las compensaciones tradicionales
Aunque estos productos se han agrupado durante mucho tiempo, los inversores, periodistas y empresarios empiezan a reconocer que pagar a otros para que no contaminen nunca nos llevará a un nivel cero.
Las compensaciones de mayor impacto —que a menudo tienen importantes beneficios ecológicos al margen del carbono— siguen siendo valiosas pero se invertirá más en las tecnologías que absorben el carbono de la atmósfera y lo almacenan permanentemente.
2. Las empresas darán prioridad a las decisiones de compra orientadas al clima
Las compañías solo pueden llegar al cero neto si traen consigo a sus cadenas de suministro, donde se esconden la mayoría de las emisiones corporativas. A medida que las nuevas normas de divulgación se generalicen, ya no habrá más escondites, ya que informarán de todas las emisiones, hasta de las materias primas, y buscarán proveedores con planes climáticos sólidos.
3. El software tendrá un papel protagonista en la lucha contra el cambio climático
El mundo está empezando a darse cuenta de todo el potencial que tiene el software en la descarbonización. A medida que los mejores talentos y el capital de riesgo continúen inundando la tecnología climática, estos productos, plataformas y mercados se convertirán en grandes apuestas que van desde el seguimiento de las emisiones hasta la compra de compensaciones y la optimización de la energía.
Los directivos de las organizaciones podrán centrarse en lo que mejor saben hacer, con un programa que les ayude a entender y a modificar sus gráficas de carbono sobre la marcha.
4. Los empleados concientes con el clima tomarán decisiones profesionales
A medida que los fenómenos meteorológicos extremos continúen y la urgencia climática se haga más palpable, más colaboradores pondrán en tela de juicio el statu quo interno.
Las empresas tendrán que incorporar programas climáticos de nivel profesional —desde una contabilidad transparente de las emisiones de carbono hasta reducciones serias de las emisiones a corto plazo en un camino hacia el cero neto— o el talento se irá.
Del mismo modo, veremos una migración continua de los mejores reclutas hacia corporaciones emergentes que construyan herramientas para la lucha ambiental.
Por último, si bien hemos logrado un progreso global significativo en la última media década, los límites de velocidad política persistirán en 2022.
Las empresas tendrán la responsabilidad de actuar como vanguardia de la acción climática, impulsando la adopción de energías limpias, descarbonizando las cadenas de suministro, avanzando en la eliminación del carbono y demostrando que doblar las gráficas de carbono es posible y rentable.
