La mayoría de los empresarios no denuncia todos los actos de corrupción que vive “porque es difícil encontrar el área adecuada para quejarse” pero también “porque quienes se quejan de los actos de corrupción también se benefician de ellos”, considera Adrián Francisco Barrios, director general de Estadísticas de Gobierno, Seguridad Pública y Justicia del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Después de que se dieran a conocer los resultados de la Encuesta Nacional de Calidad Regulatoria e Impacto Gubernamental en Empresas (ENCRIGE) 2016, en la que se reportó que la corrupción cuesta hasta mil 600 millones de pesos.
Tan se señala que más de la mitad de los empresarios en los 32 estados se topa con actos de corrupción al momento de realizar trámites con el gobierno o para evitar sanciones o multas.
De acuerdo con el INEGI, ocho de cada 10 empresas en México perciben actos frecuentes de corrupción por parte de servidores públicos y dos de cada tres actos ocurren con la finalidad de agilizar trámites. Esto quiere decir que un 39.4% es para evitar multas, 30.7% para obtener licencias o algún permiso y el 29.7% es para evitar una clausura de algún establecimiento.
Francisco Barrios dijo que quienes se enfrentan a actos de corrupción en relación con las autoridades, no denuncian, porque al igual que como ocurre con el tema de inseguridad, “consideran que pierden el tiempo y que nada va a ocurrir para cambiar esta situación”.
Para Barrios, hay dos factores que se añaden para inhibir la denuncia:
- Desconocer ante quién denunciar y/o realizar un esfuerzo grande para encontrar el área de control interno de la dependencia, que en su mayoría no existe.
- Que los empresarios se benefician de esa corrupción para obtener lo que buscan.
“El segundo problema, y ese puede ser la principal razón por la que el tema de corrupción tampoco registra quejas, es que al final de un acto de corrupción las dos partes obtuvieron lo que buscaban. Es decir, si una persona o empresa busca, de manera incompleta, con sus documentos, o de manera no formalizada, querer una licencia y se acerca a un actor gubernamental que se lo permite, el acto de corrupción que se presenta ahí deja satisfechas, entre comillas, a ambas partes y con eso no tendría la persona de qué quejarse”
“Ese es un problema que se tiene en el tema de la corrupción. Las personas tienden a no quejarse, porque al final del día lograron lo que buscaban y en el sector gubernamental no va a haber registro de ese fenómeno”, concluyó.
Las estadísticas de la respuesta de la pregunta “¿Cuál fue la razón por la que los empresarios no denuncian el acto de corrupción?” no se encuentran. Muy pocas personas respondieron a esa pregunta y los resultados son tan escasos que no representan una respuesta válida.
Las personas que incurren a la corrupción gastan mucho dinero, es por eso que se realizó una encuesta a 34 mil empresas quienes declaran que por pagar actos ilícitos pagaron alrededor de mil 600 millones de pesos, tan solo en 2016.
En México, los estados de la República que más víctimas de corrupción tienen son: Quintana Roo, Morelos y el Estado de México. Mientras que la tasa de víctimas de corrupción de las micro empresas fue de 534, mil 175 para empresas medianas y mil 317 para empresas grandes.
