PORTAL IMPULSADO POR LAS EMPRESAS RESPONSABLES:

- Advertisement -
NoticiasAcademiaJurar por la integridad

Jurar por la integridad

Cada vez son más los graduados de escuelas de negocios que prometen proteger los intereses de la sociedad en la que operan, crear prosperidad económica y actuar con honestidad.

Alrededor de 300 graduados de la Escuela de Negocios de Harvard se comprometieron a actuar con integridad durante la última ceremonia de entrega de diplomas. El juramento, concebido por un grupo de alumnos de la “Clase 2009” de Harvard, se está difundiendo a gran velocidad, entre otras cosas gracias al libro The MBA Oath, de Max Anderson y Peter Escher.

“Queremos que el título signifique algo más que lo que significa ahora —declara Anderson en la página web del libro—. Nuestro objetivo de largo plazo es transformar el campo del management, y que los profesionales con un MBA sean respetados por su integridad, su profesionalismo y su liderazgo.”

Quienes optan por esta fórmula al recibir el título también se comprometen a proteger los intereses de la sociedad en la que operan, conducir las empresas con buena fe, asumir la responsabilidad de lo que hacen, mostrar el desempeño de la compañía de manera honesta, trabajar para la prosperidad económica y cuidar el medio ambiente de todo el mundo.

Más de 3.400 graduados de escuelas de negocios, entre las que además de Harvard se cuentan Babson, IESE, IE, IMD, New York University y UCLA,  respaldan el juramento. Pero también tiene detractores. En una nota publicada en BusinessWeek, Theo Vermaelen, profesor del INSEAD, sostiene abiertamente que no lo considera una buena idea.

Y apunta tres argumentos.
Primero, que el juramento “invita a violar las responsabilidades fiduciarias. En muchos países, los miembros del directorio tienen una obligación fiduciaria de maximizar la riqueza de los accionistas.

Ninguno aceptaría que los directores promuevan la prosperidad mundial”. En segundo lugar, según Vermaelen, el juramento es una respuesta equivocada a la presunción de que la causa de la crisis fue la conducta poco ética de los ejecutivos que arriesgaron dinero ajeno. En su artículo aporta datos de bancos cuyos CEOs eran fuertes accionistas y, aun así, sufrieron grandes pérdidas.

“Hay evidencias de que los banqueros podrán haberse equivocado y los miembros del directorio podrán haber sido ignorantes, pero no son estafadores”, subraya Vermaelen.

Finalmente, pensar que se puede prevenir una crisis jurando por la integridad le parece “excesivamente inocente”. Tal vez sea inocente. No obstante, en una época en la que faltan ideales, recuperar algunos no sería mala idea.

Fuente: Gestión, p. 16
Publicada: Agosto – Septiembre 2010

Click sobre la imagen para ampliar

jurar

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

PLATIQUEMOS EN REDES SOCIALES

Lo más reciente

DEBES LEER

TE PUEDE INTERESAR