La máxima autoridad católica practica cuatro valores que también funcionan en el mundo corporativo; la filosofía jesuita, orden a la que pertenece, es la clave de su éxito: ex directivo de JP Morgan.
El papa Francisco puede ser un ejemplo a seguir en el mundo empresarial. El jesuita, actual cabeza de la Iglesia católica, basa su liderazgo en los cuatro pilares de su orden religiosa:
- Amor
- Ingenio
- Valentía
- Autoconocimiento
Así lo sugiere el ex director ejecutivo de JP Morgan, Chris Lowney, autor del libro Pope Francis: Why He Leads The Way He Leads (‘Papa Francisco: Por qué lidera en la forma en que lo hace’) en el que explica por qué el argentino Jorge Mario Bergoglio es un líder auténtico.
La clave del éxito y la buena reputación de Francisco, según Lowney, es que a diferencia de muchos líderes actuales, ególatras y hambrientos de poder, él se muestra humano y humilde.
“El Papa no es buen líder por ser católico o jesuita. La diferencia es que él está dispuesto a servir a los demás”, dice Lowney a la edición trimestral de alta gestión CEO de la revista Expansión, correspondiente agosto-noviembre de 2014.
Antes de involucrarse en el mundo financiero, Lowney estuvo siete años en un seminario jesuita para ser sacerdote. Ahí descubrió que aunque la vida religiosa no era su vocación, los cuatro pilares del liderazgo jesuita sirven para tener éxito en el mundo corporativo.
Bajo esa premisa, Lowney publicó en 2005 Heroic Leadership (‘Liderazgo Heróico’). En este libro, el autor explica por qué la Compañía de Jesús, como también conocen a los jesuitas, es una congregación religiosa que ha sobrevivido 450 años.
-¿De dónde surge la idea de vincular el mundo de los negocios con la religión y, en específico, con los jesuitas?
De mi propia experiencia. Fui seminarista y trabajé en JP Morgan. Fue entonces, en el mundo financiero, cuando empecé a analizar qué es lo que hace que una compañía u organización tenga éxito.
Descubrí que las que son bien lideradas, no importa si es un negocio, un hospital o una orden religiosa, tienen algo en común: líderes que aman lo que hacen y están dispuestos a servir a los demás, que son ingeniosos, valientes y que conocen sus fortalezas y debilidades y están dispuestos a mejorar.
Todos éstos son valores de la filosofía jesuita. Sin embargo, no tengo un enfoque religioso ni pretendo decir que los jesuitas o los católicos sean mejores líderes sólo por esa razón.
-En su último libro, Pope Francis, habla del líder de la Iglesia católica como un ejemplo a seguir, si tuviera que compararlo con el CEO de una empresa, ¿con quién sería?
Es difícil dar una respuesta. Parte de la razón por la cual creo que este papa es tan popular como líder es porque, de alguna manera, es muy distinto y opuesto al estereotipo que vemos en los líderes hoy, tanto en negocios como en política. Son ególatras y sólo les interesa su poder y su estatus.
El papa Francisco es justo lo opuesto de la mayoría de líderes. A diferencia de los demás, es humilde y cree que el poder debe ser usado para beneficio de los demás y no para beneficio propio.
Para mí, el Papa no es un gran líder sólo porque sea católico y jesuita. Hay muchos pésimos líderes con la misma formación. Él es un gran líder porque respeta a los demás, es humilde y busca el bien común.
Fuente: CNN Expansión
