Control Risks, la consultoría especializada en riesgos se dedica a resolver desafíos y crisis que surgen en las organizaciones para obtener oportunidades empresariales a nivel mundial.
Recientemente publicó en su sitio web los cinco riesgos principales para las empresas en 2020. En la publicación, control Risks expone el panorama de las empresas y el liderazgo que se encuentra a cargo de un grupo de actores políticos sin estrategias e «incapaces de ver más allá de la próxima crisis».
Por tal razón, es necesario que cada líder empresarial cuenta con las estrategias adecuadas para un mundo mejor.
De acuerdo con Nick Allan, director ejecutivo de Control Risk, «las tendencias globales están ahora más contrapuestas a los intereses de las empresas internacionales de lo que han estado durante muchos años».
«El populismo, el activismo, el proteccionismo, las sanciones y la perturbación política siguen siendo el lienzo sobre el que las empresas intentan establecer mercados y cadenas de suministro globales. No ha sido fácil en 2019 y va a ser más difícil el próximo año».
Nick Allan, director ejecutivo de Control Risk.
Los 5 riesgos principales globales para las empresas en el 2020
En el informe anual RiskMap de Control Risks se dan a conocer los 5 riesgos principales; un pronóstico de riesgo global para los líderes empresariales y los encargados de formular las políticas de todo el mundo, recién publicado:
1.- La geopolítica y la campaña electoral de Estados Unidos
La campaña electoral de Estados Unidos tendrá un impacto palpable en la geopolítica en el 2020. El drama de la campaña, combinado con la interrupción del proceso de juicio político, resonará a través de las acciones globales de Estados Unidos.
La forma en que aliados y adversarios se protegen contra la elección más ideológica en 40 años tendrá una gran influencia en el panorama de riesgo geopolítico para los negocios en el 2020.
2.- La sociedad activista juzga
En todo el mundo, las presiones sociales y el activismo coordinado en torno a problemas como la protección medioambiental, los derechos políticos y humanos, la desigualdad y la privacidad exigen cada vez más de las empresas. En la calle, en las asambleas de accionistas y en su empresa, la sociedad activista golpeará cada vez más duro en la mesa de la sala de la junta directiva en el 2020.
Para las empresas, la parálisis se cierne al tiempo que un sinnúmero de movimientos sociales hace demandas que cada vez son más ruidosas y desafiantes. Este cenagal no codificado de responsabilidad social, moral y política consumirá a cualquier empresa a la que tome desprevenida. De forma inversa, las empresas que hagan esto bien serán aceptadas. No basta con ser ético. No basta con cumplir.
3.- La guerra cibernética llega a un nuevo nivel
Las amenazas cibernéticas en el 2020 se alinearán como nunca antes para provocar un asalto de gran impacto a la infraestructura crítica. La disuasión de Occidente no ha logrado contener la marea y los actores hostiles están usando métodos cada vez más duros.
Estados Unidos tomará represalias en formas que muestren al mundo que las amenazas cibernéticas le importan. En los escenarios de conflicto estratégico, las medidas militares difíciles de aceptar darán paso a los ataques cibernéticos. Y así comenzará un nuevo ciclo de escalada: los rivales con capacidades cibernéticas equiparables a las de Occidente y sus representantes aumentarán la apuesta, con consecuencias impredecibles.
Si bien las empresas líderes están alcanzando una resiliencia cibernética creíble, las infraestructuras nacionales de todo el mundo no lo están y presentan la principal vulnerabilidad en el conflicto cibernético internacional.
4.- La ansiedad económica se encuentra con la fragilidad política
Incluso los pronósticos más optimistas señalan que el crecimiento económico global en el 2020 será estrepitosamente bajo o, como dicen nuestros socios de Oxford Economics, habrá «estancamiento»; esto sin tomar en cuenta algún choque económico que podría sacudir una economía global inquieta.
Si el PIB global empeora, no podemos esperar que un mundo fragmentado elabore una respuesta política coordinada.
En caso de una recesión, o incluso en el mejor de los casos, ¿cuáles países sobrevivirán y cuáles irán al paredón? Tome un tour global por la ansiedad económica y la fragilidad política.
5.- Líderes sin estrategias
Al timón de algunos de los países más importantes del mundo está un grupo de líderes que no pueden ver más allá de la próxima crisis.
Para ellos, la táctica triunfará sobre la estrategia. El 2020 amenaza con ser un año en el que la escalada de incidentes no se detendrá. Este es un mundo donde la resiliencia a nivel de estado es débil, y se tarda mucho en encontrar las soluciones a largo plazo.
Ya sea una guerra comercial global, un ataque cibernético o una escaramuza fronteriza regional, la marcha de los eventos está en manos de protagonistas nerviosos y ansiosos. Las empresas necesitarán una estrategia adecuada para un mundo intensamente táctico.
