Para muchas niñas y niños la infancia es una etapa de juegos y aventuras; para otros, es sinónimo de tratamientos, hospitales y restricciones. Lo que debería ser un tiempo de descubrimiento se vuelve una lucha constante por preservar la salud.
Actividades cotidianas, como correr, jugar o simplemente salir al parque, quedan fuera de su alcance y con ello también muchas sonrisas. Por eso, crear espacios que les devuelva la alegría, aunque sea por un solo día, cobra un valor enorme: puede ser justo el impulso emocional que necesitan para seguir adelante.
Consciente de ello, Fundación Pablo Landsmanas (FPL) -el brazo solidario de Corporativo Kosmos- se unió a Fundación Dr. Sonrisas para ofrecer a cientos de pequeños guerreros y sus familias una jornada distinta, esperanzadora y llena de energía positiva en el marco del Día del Niño (30 de abril).
Una alianza que pone a las infancias en el centro
Corporativo Kosmos ha convertido la responsabilidad social en una herramienta activa de transformación. A través de la Fundación Pablo Landsmanas, que se encarga de impulsar acciones que van desde la donación de alimentos y juguetes, hasta el apoyo directo en tratamientos médicos, con una visión clara: mejorar la calidad de vida de las niñas y niños que más lo necesitan.
Una muestra reciente de este compromiso fue la colaboración con la Fundación Dr. Sonrisas, organización que llevo a cabo una celebración llena de color, música, alegría, diseñada para fortalecer el espíritu de quienes más lo necesitan.
Estas acciones reflejan algo más que apoyo logístico o económico: muestra como la RSE puede generar experiencias con verdadero impacto humano.
Un día para jugar, reírse y nutrirse
Durante el evento más de 600 niñas, niños y familiares participaron en la celebración que incluyó juegos de feria, actividades creativas y dinámicas interactivas que les permitieron olvidar, por un momento, pronósticos médicos y durante la cual la risa y la convivencia familiar fueron los grandes protagonistas del día.
Para complementar la experiencia la Fundación Pablo Landsmanas aportó 600 box lunches diseñados para cubrir las necesidades nutricionales, tomando en cuenta las condiciones de salud de los asistentes.
“Una alimentación saludable es importante para cualquier persona, pero especialmente para menores que están llevando tratamientos tan fuertes o que están luchando contra alguna enfermedad, pues la buena alimentación contribuye a que reciban los tratamientos de una mejor manera”.
Lidia Sánchez, directora de programas sociales de Dr. Sonrisas.
Sin duda, el acompañamiento de Corporativo Kosmos en materia alimentaria es clave para la salud de estos menores y para que iniciativas como esta puedan regalarles momentos de alegría:
“La sinergia con fundaciones como la de ustedes es lo que nos ayuda a hacer lo que hacemos. Hay quien nos da alimento, medicinas, botargas, juegos, todos pueden ayudar. Hoy gracias a ustedes los niños y los papás están comiendo de manera nutritiva”.
Andrés Martínez, presidente y fundador de Dr. Sonrisas.
A través de este apoyo, la FPL demostró sensibilidad hacía las verdaderas necesidades de cada niña y niño, reforzando la importancia de una nutrición adecuada como parte del proceso de recuperación.
Más que una donación, una recarga de esperanza
Esta alianza no fue solo una donación de alimentos, sino una experiencia que permitió a infantes y familias reconectar con la alegría y convivir lejos de los hospitales que se han vuelto parte de su rutina. Fue una pausa necesaria para reencontrarse con la esperanza:
“En Dr. Sonrisas creemos que son importantes este tipo de eventos que cambian el día a día de las niñas, niños y sus familias, que puedan divertirse, jugar y pasarla padre, esto es algo muy importante dentro de todo este proceso de la enfermedad de los pacientes”.
Pedro Alvista, Director operativo de Dr Sonrisas.
Los momentos de esparcimiento funcionan como un bálsamo emocional en procesos tan duros como lo es la lucha continua contra una enfermedad, ya que permiten recargar energías para seguir luchando. Para las familias, estos espacios significan contención, apoyo y comprensión, además de momentos en los que pueden ver a sus hijas e hijos sonreír.
Por si fuera poco, la suma de esfuerzos solidarios para crear eventos como la Posada del Día del Niño, no solo cambian un día, sino que transforman la percepción del presente para los pacientes y sus familiares, quienes recobran el ánimo y ganan fuerzas para continuar con sus tratamientos”.
Un compromiso empresarial que deja huella
El compromiso de Corporativo Kosmos con causas sensibles como la infancia con enfermedades graves demuestra que la empresa no solo piensa en operar con excelencia, sino generar bienestar a las comunidades más vulnerables. Su alianza con Fundación Dr. Sonrisas es ejemplo de cómo una donación puede convertirse en una experiencia transformadora.
Como lo expresó Andrés Martínez, presidente de Fundación Dr. Sonrisas, en un mundo donde la responsabilidad social empresarial se ha convertido en una exigencia ética, es fundamental que más compañías como Corporativo Kosmos se sumen al cambio:
“El tema de la responsabilidad social ya pasó de ser un extra a ser una necesidad, creo que hoy estamos en un mundo que tiene muchísimas necesidades y si hay algo que no se vale es no hacer nada. Espero que, como Corporativo Kosmos, cada vez más empresas estén buscando hacer algo para cambiar el mundo, para mejorar nuestro país”.
Andrés Martínez, presidente y fundador de Dr. Sonrisas.
En un entorno con tantas necesidades, alianzas como esta no solo contribuyen a construir un mejor presente, si no que nos recuerdan el poder de hacer algo, aunque sea pequeño, para marcar la diferencia.
