2070 Un mundo sin agua cuenta la historia de un futuro destruido ambiental y socialmente. En él, un grupo de científicos tiene en sus manos el poder de decidir lo que sucederá con la población para que no continúen las muertes por falta de alimentos, agua y una calidad de vida muy baja, poniendo en marcha investigaciones en las que trabajaron durante años.
Su plan hitleriano lleva el nombre AO-2070 y consiste en convertir a las personas en androides para limpiar la raza y poder salvar al 60% de la población restante. Para esto, crean un reducto en el cual las personas son llevadas para su monstruosa transformación.
Es curioso ver en escenarios relativamente pequeños como el del Cubo a 25 artistas que cantan y bailan. En nuestra opinión, esto resulta -para bien o para mal- lo más sorprendente del espectáculo. Es válido destacar el trabajo realizado por Rocío Luz Alvarez y Lucila Abramian, quienes supieron resolver con solvencia el vestuario de los personajes futuristas que habitan en el universo de la obra, así como también la labor del equipo de maquillaje.
Si bien resaltamos y aplaudimos con entusiasmo todas las propuestas que lleven a pensar en la forma en la que mal gastamos los recursos naturales del planeta y cómo, poco a poco, vamos destruyendo el entorno en el que habitamos, 2070 Un mundo sin agua nos deja con ganas de una propuesta: ¿qué podemos hacer para frenar lo que parece inevitable? La obra advierte pero no da una alternativa para el cambio. La elaboración de una propia queda por parte del espectador.
Fuente: Tu Verde
