Programa 21 Municipal

Desde que tomaron posesión del cargo las nuevas administraciones municipales en el territorio del Estado de México, se dieron a la tarea de formalizar los análisis y diagnósticos de las condiciones en que recibían lo que sobró.

De ahí surgieron los foros para consultar a la ciudadanía acerca de las necesidades comunes. No obstante que aumenta la desnutrición política en la población, originada por el desencanto ante los mediocres resultados ecológicos, económicos, políticos y sociales, hay aceptación a las convocatorias y a quien las hace porque no acaba de morir la esperanza de un mejor futuro.

Así como existe una Agenda 21 mundial que casi todas las naciones han comenzado a desarrollar en lo particular, del mismo modo es obligado darle forma a nivel municipal en el caso de nuestro país. Sus temas fundamentales inician con las dimensiones sociales y económicas: desarrollo sustentable, pobreza, consumo, dinámica demográfica, salud, desarrollo de recursos humanos y medio ambiente.

Otro apartado es la conservación y gestión de los recursos para el desarrollo: protección de la atmósfera, planificación y orden territorial, deforestación, desertificación, sequía, ecosistemas frágiles, diversidad biológica, biotecnología, agricultura y desarrollo rural.

No es el caso de considerar los recursos marinos, pero si lo relacionado con el agua dulce, productos químicos tóxicos, desechos peligrosos, desechos sólidos, aguas residuales y desechos radiactivos.

Aparecen después los grupos principales: mujer, infancia, juventud, adultos mayores, grupos indígenas y su fortalecimiento. El papel de las Organizaciones de la Sociedad Civil como apoyo en la búsqueda del desarrollo sustentable. Trabajadores, sindicatos, agricultores, comercio e industria. La comunidad científica y tecnológica, el fomento a la educación, capacitación y toma de conciencia.

A grandes rasgos es lo que debe incluir un programa de gobierno para un primer paso exitoso en la planeación de los destinos municipales. Es el interés de las administraciones entrantes, con visión del significado de la sustentabilidad ambiental urbana para enfrentar el reto planteado en el futuro común del municipio, el estado y la nación.

La consulta pública entendida como la experiencia entre el Estado y la sociedad civil, en la que se entrelazan profundizan e intercambian puntos de vista que enriquecen el ejercicio de la democracia.

Crecer como municipio fuerte, integrado al concepto de progreso y competencia, requiere aplicar el nuevo tipo de planificación: la ecológica, ambiental o estratégica, para planear y programar el uso del territorio, las actividades productivas, el ordenamiento de los asentamientos humanos y el desarrollo de la sociedad, en congruencia con el potencial natural de la tierra, el aprovechamiento sostenible de los recursos naturales y la protección y calidad del medio ambiente.

Así, el municipio será vanguardista al responder a las exigencias de fondo que demandan las necesidades del urbanismo moderno de un lado y de otro las de su comunidad comprometida con el entorno: satisfacer las necesidades de las generaciones actuales, sin comprometer las posibilidades y necesidades de las futuras generaciones.

Como propuesta y dentro del amplio campo de la contaminación, puede enfatizarse en la visual, lumínica y auditiva, hasta hoy poco atendidas. La primera nos la ilustran los mismos señalamiento viales encimados tapándose unos a otros, las telarañas de cables corriendo a lo largo y ancho de las calles y banquetas, los postes y cabinas telefónicas tapizados con anuncios al igual que las bardas junto con su modalidad de vallas publicitarias, anuncios luminosos y espectaculares que no pagan la energía eléctrica que consumen y muchos etcéteras más.

La que aparentemente no produce trastornos en el medio ambiente porque no se ve, no se respira y no es tangible, es el ruido Los niveles sonoros actuales y los casos de sordera son cada vez más altos en la población.

Rebasamos las normas internacionales y también aquí se ignora la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente así como el Código para la Biodiversidad del Estado de México, que consideran al ruido como forma de contaminación porque al propagarse por el aire, agua o suelo, modifica ecosistemas y daña la calidad de vida de las personas.

La forma: con un trabajo intermunicipal los municipios del Valle del Matlatzinco, pueden ser pioneros y promulgar un Reglamento de Anuncios Publicitarios y Niveles Auditivos, bien fundamentado y claro en su entendimiento y aplicación para que resulte impecable sin dejar vacíos que lo vulneren.

El fondo: el interés de las administraciones entrantes en cumplir con la ciudadanía, porque: TODOS SOMOS NATURALEZA.