Cuando la organización ha tomado la decisión seria y comprometida de implantar el concepto de responsabilidad social, debe llevara cabo una serie de pasos planificados, y posteriormente gestionar y mejorar el sistema.
Para ello, es preciso establecer un proyecto específico en el que participen todos los niveles de la empresa, comenzando por la alta dirección.
La cultura empresarial es el conjunto de normas, valores y formas de pensar que caracterizan la conducta de los miembros de la organización, en todos los ni-veles de la empresa.
El objetivo de la cultura organizacional empresarial es establecer qué valores y normas son los que definen la empresa y sus conductas éticas de actuación.
Es una decisión libre y responsable por medio de la cual se aspira a conseguir la capacidad de innovación, imaginación y flexibilidad que el mercado y entorno social le exigen.
Esta es una herramienta fundamental para la toma de decisiones en la organización, y es la clave y guía para la solución de dilemas éticos que el entorno le plantea constantemente; asimismo, es el elemento que le permite construir relaciones de confianza con sus partes interesadas.
Entre otros, los principios característicos de una empresa responsable son: la integridad, la honestidad, el compromiso, la lealtad y el respeto a los demás.
El Financiero, “Estrategia Empresarial”, Mercados, p. 7
