En México los jóvenes de entre 15 y 29 años representan una cuarta parte de la población, al sumar más de 30 millones de personas, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Consiente de la importancia de la juventud como principal agente de cambio en la sociedad, Fundación MAPFRE reafirma su compromiso con ellos a través del programa Una apuesta de futuro, el cual busca impulsar el desarrollo académico de los jóvenes, quienes en paralelo crean proyectos que promueven el bienestar en su comunidad de origen.
Desde 1995, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 12 de agosto como Día Internacional de la Juventud; y este año destaca la participación de los jóvenes en el fomento de la paz mundial, así como la lucha por la inclusión, justicia y desarrollo sostenible.
En sintonía con estos planteamientos, Fundación MAPFRE celebra más de diez años de labores de Una apuesta de futuro, desarrollado en alianza con la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP). Su objetivo es promover el talento de jóvenes originarios de comunidades rurales para ayudarles a convertirse en líderes locales y emprendedores sociales dedicados a mejorar la calidad de vida de las personas. Los estados que abarcan son Puebla, Veracruz, Guerrero, Oaxaca y Chiapas.
Al año, ingresan entre 10 y 15 estudiantes al programa Una apuesta de futuro, el cual les ofrece una beca al 100% en la licenciatura de su elección, hospedaje y alimentación a lo largo de su carrera universitaria. Además, tienen a su alcance oportunidades de intercambio académico, así como soporte formativo y de acompañamiento a lo largo de todo el proceso. Esquema que es posible gracias al apoyo de las empresas y organizaciones donantes, entre ellas Fundación MAPFRE, que ha aportado más de 12 millones de pesos a lo largo de una década para la formación de nuevos profesionistas.
“Una apuesta de futuro es la más grande oportunidad y el pilar incondicional que me brinda las virtudes para lograr cosas extraordinarias, cumplir sueños que parecían inalcanzables y lograr cambios que parecían inimaginables”, expresó Irma Díaz, estudiante de Odontología, originaria de Santiago Coltzingo e integrante del proyecto “Tlahuapan, la tierra que nos une” para el desarrollo técnico, productivo y administrativo de los habitantes.
Durante más de 10 años de existencia, Una apuesta de futuro ha apoyado a 169 estudiantes y actualmente mantiene a 58 estudiantes en formación académica. Asimismo, se han sumado 15 organizaciones de la sociedad civil, 37 voluntarios para la procuración de fondos y 70 tutores dedicados al seguimiento puntual del progreso de los estudiantes.
“He aprendido en el programa que la vida pone a las personas correctas en el momento correcto para generar ideas de cambio. Puedes soñar, crear, construir, diseñar e imaginar un mundo más increíble, pero necesitas a gente con la misma iniciativa para que éste se haga realidad”, comentó Ubaldo Pérez, estudiante de Ingeniería en Software que actualmente trabaja en el proyecto “Cambiando mentalidad y creando posibilidades en Yancuitlalpan por la producción”, para mejorar las condiciones de vida de su comunidad.
La meta para 2023 es ampliar el alcance de esta iniciativa de innovación social a 100 alumnos beneficiados por generación.
Comunicado de prensa.
