El ministro de Asuntos Éticos asegura que es ‘inmoral’ vestir asi
La pornografía también será penada con 10 años de cárcel y 3.000 euros
Como en los tiempos del terrible dictador Idi Amin, el Gobierno de Uganda se plantea prohibir el uso de la minifalda, bajo pena de cárcel, por «incitar a la violación». La medida que irá al Parlamento ha levantado una tremenda polvareda mundial y en Twitter, el hashtag #saveminiskirt está provocando una campaña de críticas internacional.
«Vergonzoso. Lokodo (nombre del ministro) culpa a las mujeres de las violaciones», dice la periodista Rosebell Kagumire en uno de los mensajes de la red social.
«Es indecente e inmoral vestir minifaldas», ha dicho Simon Lokodo, ministro de Asuntos Éticos e Integridad de Uganda. El político, antiguo sacerdote católico, ha declarado que «cualquier atuendo que expone partes íntimas del cuerpo humano, especialmente en áreas que son de la función erótica, están fuera de la ley. Cualquier cosa por encima de la rodilla está fuera de la ley. Si una mujer lleva una minifalda, la vamos a detener».
Lokodo afirmó recientemente a una mujer que había sido víctima de abusos sexuales que «puedes ponerte la ropa que quieras, pero no provoques. Las mujeres que visten provocativamente a veces son atacadas. Él es un criminal, pero lo cierto es que fue provocado», dijo el vigilante de la moralidad en el país. «Queremos evitar esos abusos», alega el ministro.
No sólo las minifaldas serán prohibidas, también la pornografía será perseguida por la ley bajo pena de diez años de cárcel y cerca de 3.000 euros de multa. Lo curioso es que el ministro incluye entre los programas a perseguir los vídeos de Beyonce o Madonna que a partir de que se apruebe la ley no pasarán más en la televisión.
«La televisión no debe enseñar mujeres sexys. Ciertas partes del cuerpo sólo puede verlas el cónyuge en un lugar privado», afirma el ministro que deja claro que eso sólo afecta a las mujeres. «Los hombres sí pueden enseñar sus cuerpos, no generan atracción».
Monitorizar los ordenadores
Para acabar con esa pornografía mediática, el ministro prevé un control absoluto de lo que se emite en televisión y la monitorización de todos los ordenadores del país para controlar si entran en páginas pornográficas.
La medida que irá ahora al Parlamento por segunda vez en los últimos años, ya lo intentó en 2008 el anterior ministro de Ética de Uganda, ha tenido ya el rechazo de algunos representantes políticos que la ven excesiva y que le encuentran el problema de que «atentaría contra prácticas tradicionales».
Fuente: El Mundo
