En los foros especializados de bioética a nivel internacional, Dafna Feinholz se distingue como líder. Hablar de bioética era aún picar piedra: sentar a la mesa a todos los involucrados para encontrar mínimos morales comunes.
Ése fue el inicio de Feinholz como tejedora de redes en la región. En 2005 Feinholz, quien también es tutora del posgrado de Bioética de la UNAM y coautora del artículo más citado durante dos años de la revista «Developing World Bioethics», participó en París como miembro del Comité Intergubernamental de Bioética de la UNESCO en la redacción de la Declaración Universal de Bioética y Derechos Humanos.
Gracias a su intervención se unió el bloque latinoamericano y obligó a los países opositores al Artículo 14, alusivo a la Responsabilidad Social, a reconsiderar su postura e incluir las demandas de los países en desarrollo.
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