Ante un panorama internacional local, variante y poco estable, la economía mexicana en 2022 parecía comenzar con modestas probabilidades de recuperación, ya que en enero reportó 0.4% de crecimiento con respecto al último mes del 2021, según lo afirman datos de El Economista.
Sin embargo, casi en seguida, la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) bajó su pronóstico de crecimiento del PIB nacional, el cual había establecido en 3.3%, y en febrero lo colocó en 2.3%. Además, la instancia compartió en un reporte, que los planes de crecimiento económico de nuestro país se habían deteriorado debido a la falta de reformas robustas que impulsaran la inversión y la productividad.
Lo cierto es que la situación de la economía mexicana en 2022 se muestra preocupante para todos los sectores y bolsillos, impactando a las personas y, aunque el gobierno ha anunciado medidas para contener la inflación, no existe una estrategia que proyecte mejorías a largo plazo.
