Esta columna es patrocinada por CEMEX, impulsando la construcción sustentable.
Faltando todavía unos años para celebrar la XXI edición de la Copa Mundial de Fútbol en 2018, Rusia ya está haciendo los preparativos para que el evento sea toda una muestra de construcción sostenible, presumiendo además de un increíble diseño arquitectónico que además de verde, será cultural y de diseño futurista.
Por construirse en la ciudad de Rostov, el estadio dispondrá de 45 mil asientos durante el desarrollo de la copa, mismos que se reducirán a 25 mil una vez terminado el evento para obtener más espacio y adaptarlo a nuevas necesidades, ya que esta planeado para convertirse en un centro cultural.
Inspirados en los movimientos de tierras ancestrales a lo largo de las orillas del río Kurgans, Populous, será la firma encargada de materializar también los diseños de las sedes en Kazan, Saransk y Sochi. Esta oficina especializada en proyectos deportivos fue la encargada de realizar el estadio olímpico de Londres,
Rodeada por una enorme cortina blanca, la construcción permitirá el paso de la luz natural y favorecerá la ventilación, cuidando el medio ambiente al tiempo que protege a sus visitantes de la lluvia y los vientos fuertes.
El Rostov Stadium será el pilar de un proyecto para promover la cultura y ayudar a proteger los humedales que se encuentran alrededor de él, gracias a un plan integral que pretende introducir a la ciudad de lleno en el mundo de la sustentabilidad.
De esta forma, el estadio de Rostov contempla los tres principios de la sustentabilidad convirtiéndose en un proyecto que además de cuidar el medio ambiente y significar una gran inversión económica, también contempla el aspecto social al plantearse como un espacio para difundir la cultura entre los habitantes de Rusia.
Redacción: Expok
Por Corinna Acosta
