En un mundo donde la tecnología sostiene lo cotidiano de manera silenciosa, Indra Group se consolida como una fuerza que no solo impulsa la transformación digital, sino que genera un impacto social real y medible. Su más reciente Informe de Sostenibilidad 2024 para Colombia, Ecuador, Centroamérica y el Caribe revela una hoja de ruta en la que la inclusión, la equidad y la sostenibilidad dejan de ser promesas para convertirse en acciones concretas.
El 23,65 % de su plantilla en Colombia pertenece a colectivos de inclusión, reflejo de una política activa por entornos laborales diversos, respetuosos y equitativos. A esto se suma una participación femenina del 36,89 %, con un 38,5 % de mujeres en cargos directivos, superando ampliamente los promedios de la industria tecnológica en América Latina.
Más allá de sus cifras internas, Indra ha impactado a más de 5.000 personas mediante programas de voluntariado, formación y el impulso a vocaciones en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, conocidas como habilidades STEM por sus siglas en inglés. Iniciativas como “Academia” —que capacita a 30 personas por cohorte, con una tasa de contratación del 25 %— y seis jornadas Hackday en Colombia y Perú con más de 1.250 inscritos, refuerzan su apuesta por cerrar brechas sociales desde la innovación.

En materia ambiental, la compañía recibió el Sello Verde de Verdad 2024. Programas como *Cero Desperdicio*, que evitó la emisión de 4.486 kg de dióxido de carbono equivalente (CO₂eq)—una medida que refleja el impacto total de diversos gases de efecto invernadero en términos comparables al CO₂—, y el *Plan Amazonía*, con la restauración de 13,5 hectáreas de bosque nativo en Caquetá, consolidan su compromiso con el planeta.
La seguridad también hace parte del propósito. En Medellín, Indra fortaleció su Centro de Excelencia en Ciberseguridad Industrial (CECI), el primero en su tipo en Colombia, Centroamérica y el Caribe, orientado a proteger infraestructuras críticas ante amenazas emergentes.
“El informe no es solo una rendición de cuentas: es un ejercicio de mejora continua. Nos impulsa a seguir siendo una empresa que transforma vidas con el respaldo de Indra”, señala Carolina Montoya, gerente de Sostenibilidad de Indra Group para Ecuador, Colombia, Centroamérica y el Caribe.
Este enfoque refleja una convicción profunda: que la mejor tecnología no necesita llamar la atención para cambiar vidas. Cuando la innovación se integra con propósito, lo cotidiano se transforma en algo extraordinario. Así lo demuestra Indra, donde la sostenibilidad no es discurso, sino una forma de estar en el mundo: con tecnología al servicio del ser humano, transformando realidades y mejorando lo esencial, incluso cuando nadie lo note.