La crisis del sistema financiero moderno es una oportunidad para replantear el papel del mercado para solucionar problemas como la pobreza o el cambio climático, pero ahora con emprendedores sociales.
Bill Drayton, fundador de Ashoka, aceleradora pionera de negocios sociales, dijo que el colapso visible de un sistema financiero disfuncional acelerará el surgimiento de ideas innovadoras para remediar sus fallas, que vendrán de emprendedores y no del gobierno.
Un emprendedor social, en opinión del Foro Económico Mundial (WEF), no es quien actúa de manera altruista, sino que persigue un fin económico con un fuerte impacto social, marginando las ganancias.
Muhammad Yunus, premio Nobel de la Paz y quien ha sido estandarte de este movimiento, dijo que las empresas sociales pueden no ser tan eficientes como negocios en busca de utilidades, pero se distinguen por buscar ayudar a la gente.
Reforma, Negocios, p. 7 Lunes 03 de noviembre de 2008
