Después de ocho años en los que Estados Unidos permaneció al margen de la lucha contra el cambio climático, la Administración de Barack Obama ha decidido retomar el liderazgo mundial en este rubro.
El 26 de enero, el Mandatario firmó dos órdenes ejecutivas con la intención de reducir la dependencia de su país al petróleo como fuente de energía y combatir el cambio climático.
Por su parte, la Agencia estadounidense de Protección del Medio Ambiente declaró el 18 de abril que seis gases de efecto invernadero son peligrosos para la salud, el primer paso para regular sobre los mismos, mientras el Capitolio analiza varios proyectos de ley sobre el tema, incluyendo la creación de un mercado de derecho de emisiones.
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