Javier Ayuso, director de Comunicación e Imagen de BBVA, ha anunciado la «congelación de las retribuciones fijas y variables para todos los altos directivos» en un momento en el que los sueldos astronómicos de ciertos cargos están siendo cuestionados.
A pesar de esto y según ha indicado Antoni Ballabriga, director de Responsabilidad Social del banco, el objetivo para 2009 es mantener la inversión de 85 millones de euros en Acción Social que se realizó en 2008 «a pesar de la crisis», aunque en América Latina se prevé que la inversión del grupo destinada a políticas de RSE aumente un 8% hasta alcanzar los 32 millones de euros (un 1% del beneficio neto).
En Latinoamérica, el principal beneficiado de esta inversión es el programa de becas de BBVA. En 2008, se invirtió en Acción Social en los países de la región 29,6 millones de euros (un 50% más que en 2007), lo que posibilitó que más de 47.100 niños recibieran ayudas para poder estudiar, una cifra que el banco prevé aumentar hasta los 50.000 niños en 2009.
Otro de los pilares de la política de RSC de BBVA son las microfinanzas. Gracias a ellas 1,7 millones de personas se beneficiaron en 2008 de este tipo de créditos, destinados a pequeños emprendedores de Latinoamérica que por su mala situación económica no pueden acceder a los créditos tradicionales de la banca convencional.
En concreto, la Fundación Microfinanzas de BBVA atendió a 350.000 clientes en Latinoamérica (el 60% de ellos mujeres), cuenta con 1.700 empleados, una red de 160 oficinas y su volumen total de microcréditos asciende a 287 millones de dólares -casi 225 millones de euros-, unos 830 dólares de media por cada crédito -casi 650 euros-.
En cuanto a la Inversión Socialmente Responsable (ISR), el BBVA destaca en el informe que más de 49.900 empleados participaron en cursos de formación sobre prevención de blanqueo de capitales y de la financiación de actividades terroristas, y 276 especialistas en este área colaboraron con el banco en 2008 para evitar que el dinero del banco financiara actividades delictivas.
Además, en el 2008 la entidad analizó el riesgo que supone pare el medio ambiente las actividades de 252.705 de sus clientes, un 29% más de los que analizó el año pasado. El 82,4% de los auditados tenía un riesgo ambiental bajo, el 17,1% un riesgo medio y sólo un 0,5% tenía riesgo de afectar negativamente a su entorno.
BBVA también ha hablado de su presencia en paraísos fiscales. Al respecto ha dicho que el banco se retiró en 2008 de 36 centros financieros ‘off-shore’ o paraísos fiscales en los que operaba hasta entonces, aunque según ha afirmado Vicente Rodero, director de BBVA para América del Sur, aún opera en «tres o cuatro» centros de este tipo donde ciertos impuestos son muy bajos o inexistentes.
Rodero también ha afirmado que la entidad bancaria tiene «actividades residuales y comerciales» en esos paraísos fiscales que «todavía no puede dejar de realizar», aunque indicó que el objetivo de la entidad es retirarse de todos los centros ‘off-shore’, tal y como se comprometió a hacer en 2004.
Entre los paraísos en los que todavía opera el BBVA, ha indicado Panamá y Cura Sao, cerca de la frontera con Venezuela. «El resto de centros –en los que hay presencia del BBVA– son totalmente residuales y estamos en proceso de retirarnos», insistió el directivo del banco.
País: España
