Holanda es el primer país en tratar el tema de los altos sueldos ejecutivos y empieza a ser referido como modelo.
A partir del 1 de enero de 2009, el gobierno cobrará un impuesto de 30% a las primas de retiro que reciban los ejecutivos que tengan un salario superior a medio millón de euros al año.
Además, para desalentar la práctica frecuente de subirse el salario poco antes de la jubilación para sí acceder a un retiro millonario, la empresa tendrá que pagar al Estado 15% de cualquier aumento suplementario.
El gobierno holandés prevé recaudar así 76 MMD en 2009.
Expansión, Tendencias, p. 204, Núm. 1005, 8-21 de Diciembre de 2008