En un movimiento que trasciende el simple relevo directivo, Coca-Cola México ha nombrado a Louis Balat como su nuevo presidente a partir del 1 de noviembre de 2025. Originario de Tampico, Tamaulipas, Balat no solo regresa a sus raíces tras más de dos décadas en el Sistema Coca-Cola, sino que trae consigo un historial que lo posiciona como un catalizador clave para abordar los desafíos de sustentabilidad social y ambiental que México enfrenta con urgencia.

En un país donde la escasez de agua afecta al 75% del territorio, la contaminación plástica satura océanos y ríos, y la obesidad impacta al 75% de los adultos, su liderazgo podría ser el puente entre la ambiciosa estrategia global de la compañía y las realidades locales, con impacto tangible en comunidades y en el planeta.
Un perfil global con raíces locales
El comunicado oficial resalta la vasta experiencia de Balat: 28 años dentro del Sistema Coca-Cola, con roles en México, Ecuador, la Unidad Andina (Colombia, Venezuela y Ecuador), Singapur, Malasia, Brunei y, más recientemente, como presidente de la Zona Centro de América Latina desde Costa Rica, supervisando 32 países.
Pero más allá de los cargos ejecutivos, lo que distingue a Balat es su paso por la dirección global de sustentabilidad, donde participó activamente en la implementación del programa Un Mundo Sin Residuos (World Without Waste). Esta iniciativa, lanzada en 2018, ha sido el eje de la transformación ambiental de la compañía, con metas como reciclar el 100% de sus envases y reducir las emisiones de carbono en un 25% para 2030. Bajo su coordinación, la empresa avanzó en alianzas con gobiernos y ONGs para recolectar y reciclar miles de millones de botellas, un modelo que adaptó en mercados emergentes de Asia y Latinoamérica.

Un historial de acciones concretas en sustentabilidad
Balat no es un teórico de la sustentabilidad: es un ejecutor. Durante su gestión como CEO de The Coca-Cola Company en Singapur, Malasia y Brunei, impulsó proyectos locales de economía circular que redujeron el desperdicio plástico en un 20% en la región del Sudeste Asiático, según reportes internos de la compañía.
Colaboró con la Singapore Green Plan, integrando metas de cero residuos en la cadena de suministro y promoviendo el uso de PET reciclado (rPET) en el 50% de las botellas producidas localmente. En Ecuador y la Unidad Andina, donde dirigió operaciones generales, expresó una visión clara sobre la equidad social:
“La sustentabilidad no es solo ambiental, sino un motor para generar empleo digno en comunidades vulnerables” — Louis Balat, en entrevista con El Comercio (2020).
Alineó esta convicción con programas de capacitación para recolectores informales de residuos.
Estas acciones reflejan una filosofía que Balat ha sostenido consistentemente: la colaboración como pilar de transformación. En su rol global enfatizó que “el progreso se logra cuando todos los actores del ecosistema –desde embotelladores hasta consumidores– avanzan en la misma dirección.” Esta visión resuena con la estrategia corporativa de Coca-Cola, que en su reporte de sustentabilidad 2024 destaca la “integración de la agenda ESG en cada decisión de negocio”.
Sin embargo, en México, Balat llega en un momento crítico que exigirá traducir esa narrativa en resultados locales medibles.
México: un mercado estratégico bajo presión
México representa el 2% del PIB nacional a través de la Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC), generando 1.7 millones de empleos directos e indirectos con ocho socios embotelladores. Pero el país enfrenta condiciones que amplifican las presiones globales:
- Sequía extrema en el norte amenaza la disponibilidad de agua para la producción y para las comunidades.
- 90% de los plásticos aún no se reciclan adecuadamente, agravando la contaminación marina.
- La obesidad sigue siendo un desafío de salud pública que interpela directamente al portafolio de bebidas azucaradas.
De acuerdo con la presentación “Mexico Market Visit 2025” para inversionistas, la agenda de sustentabilidad de Coca-Cola ya muestra avances relevantes:
- Más del 30% del volumen de ventas en envases reutilizables.
- Tasas de recolección de envases por encima del promedio global.
- Crecimiento del 15% en contenido rPET entre 2022 y 2023.
Además, la compañía lidera la Plataforma de Acción Colectiva, que reúne a más de 60 organizaciones para acelerar metas ambientales con enfoque en Liderazgo en Agua y Un Mundo Sin Residuos.

De los compromisos globales a las acciones locales
El liderazgo de Balat será decisivo para escalar y consolidar estas iniciativas:
Agua y cambio climático México está entre los 20 países con mayor estrés hídrico, y Coca-Cola afirma reponer el 120% del agua utilizada en zonas de alto riesgo, según su reporte 2024. Balat puede fortalecer proyectos de recarga de acuíferos en Chiapas y Veracruz, integrando comunidades locales e indígenas para un impacto social directo. Su experiencia en Costa Rica (2023-2025), donde impulsó alianzas público-privadas para monitoreo climático, ofrece un modelo replicable ante la nueva Ley General de Aguas (2024).
Plásticos y economía circular Con la meta global de recolección al 100%, México ya supera el 80% en ciertas regiones. Balat podría fortalecer la Plataforma Colectiva incluyendo a más cooperativas de recicladores, abordando desigualdades sociales. En Asia promovió incentivos fiscales para el uso de rPET; en México, este enfoque alinearía con la Ley de Economía Circular, en discusión para 2026.
Salud pública y portafolio responsable En un contexto donde el debate sobre los impuestos saludables (IEPS) impulsa la reformulación de bebidas bajas en calorías, Balat puede acelerar compromisos para reducir azúcares y ampliar la oferta de opciones nutritivas. Su experiencia en la integración de Jugos del Valle y la expansión hacia categorías como hidratantes y bebidas funcionales lo posiciona para liderar una transición que combine rentabilidad con bienestar social.
Un liderazgo que regresa para construir confianza
El nombramiento de Balat no es solo un regreso a casa, como él lo expresó —“No hay nada como volver a casa y trabajar por el país que queremos”—, sino una apuesta estratégica por un México “limitless”, como titula la presentación para inversionistas.
Su trayectoria demuestra capacidad para formar equipos con propósito compartido, navegar entornos regulatorios complejos y mantener la brújula en innovación y sostenibilidad.
Pero más allá de las metas y reportes, su verdadero desafío será reconstruir confianza social en torno a una marca que, aunque emblemática, enfrenta crecientes cuestionamientos sobre su papel en los temas de agua, salud y residuos.
En tiempos donde la sustentabilidad ya no se mide solo por litros repuestos o toneladas recicladas, sino por legitimidad y transparencia, el liderazgo de Balat será una prueba sobre cómo una empresa global puede —finalmente— hacer sostenible su relación con México.
Fuentes: Comunicado de Prensa de Coca-Cola México (3 nov 2025); Presentación “Mexico Market Visit 2025”; Reportes de Sustentabilidad TCCC (2023-2024).







