Dentro del sector de los servicios alimentarios, Grupo Restaurantero Gigante ha destacado como uno de los principales promotores de una gastronomía que logra no sólo ser sostenible en lo económico, sino también en lo ambiental y en lo social. Desde su fundación, la compañía ha trabajado bajo una visión empresarial alineada con los criterios ASG, los Objetivos de Desarrollo Sostenible y los Principios del Pacto Mundial, lo que le ha permitido construir operaciones más eficientes y transparentes, así como adoptar prácticas que reducen su huella ambiental e impulsan el desarrollo social y económico de las comunidades donde opera.
El grupo, conocido por cadenas como Panda Express, Toks, Shake Shack y El Farolito, ha logrado posicionarse como un ejemplo de responsabilidad corporativa debido a su modelo de liderazgo humano, el cual coloca a las personas en el centro y fomenta una cultura organizacional basada en la solidaridad, la inclusión y la corresponsabilidad, pero también debido a la implementación de acciones y programas como los que se presentan a continuación:
6 razones por las que Grupo Restaurantero Gigante es un líder responsable
1. Apoyo estratégico a pequeños productores
GRG impulsa el desarrollo económico de comunidades vulnerables mediante una cadena de abasto responsable que prioriza la compra local. Tan solo en 2023, la compañía destinó más de 34.6 millones de pesos al apoyo a Proyectos Productivos, los cuales tienen como objetivo ayudar a los pequeños productores a escalar sus negocios y que estos puedan integrarse a la cadena de suministro del grupo mediante un esquema que promueve el comercio justo y el consumo local.
Gracias a estas acciones, 6,560 personas fueron beneficiadas a través de 17 proyectos acompañados técnica y comercialmente por el grupo, demostrando que una cadena de suministro sostenible puede generar prosperidad compartida y reafirmando el liderazgo de Grupo Restaurantero Gigante como uno de los más responsables dentro del sector.

2. Regeneración de ecosistemas forestales
A través de su colaboración con Reforestalia, que brinda la oportunidad de adoptar árboles en maceta durante la temporada decembrina, GRG impulsa la conservación de una zona boscosa ubicada en los límites entre la CDMX y Morelos que ha sido nombrada como Bosque Toks. Esto ha sido posible gracias a que, cada año, mediante campañas de voluntariado, los colaboradores del grupo participan en la reintegración de los árboles navideños utilizados en sus sucursales a su hábitat natural.
La reintegración y adaptación de estos árboles al bosque contribuye a la salud del suelo, mejora la biodiversidad y promueve la participación comunitaria y es una prueba más del liderazgo responsable de Grupo Restaurantero Gigante y su compromiso frente a los desafíos ambientales.

3. Acceso a servicios médicos para colaboradores y comunidades
GRG realiza jornadas médicas que benefician no solo a sus colaboradores, sino también a productores de su cadena responsable. Uno de sus más recientes esfuerzos en materia se llevó a cabo en Xochistlahuaca, Guerrero, donde la compañía brindó servicios de odontología, ginecología, optometría, audiología y medicina general a la comunidad amuzga vinculada a la producción de la miel que se sirve en Toks.
Estas acciones fortalecen la salud integral de las familias productoras, mejoran su calidad de vida y refuerzan un modelo de negocio que pone a las personas en el centro y busca impulsar el bienestar, la equidad y la cohesión social en toda su cadena de valor.

4. Gestión y reciclaje de residuos
El grupo ha desarrollado un programa robusto de reciclaje que no solo reduce su impacto ambiental, sino que financia el Fondo Verde, un programa que apoya a sus colaboradores en servicios médicos no cubiertos por los seguros tradicionales.
Solo en 2023, GRG recolectó 86,668 litros de aceite vegetal usado, generando más de 813 mil pesos para el fondo. Además, recicló más de 63 toneladas de residuos orgánicos, 572 tóneres vacíos y más de 10 toneladas de bagazo, así como el PET, cartón, tarimas y latas que se generan en sus centros de distribución, materiales por los que se logró obtener 205,743 pesos destilados en totalidad a Fondo Verde. Este modelo circular confirma por qué el liderazgo de Grupo Restaurantero Gigante es un referente en gestión de residuos y bienestar interno.

5. Uso de empaques biodegradables en todas sus marcas
Con una inversión de más de 35.9 millones de pesos en empaques biodegradables, GRG demuestra su compromiso con la reducción de plásticos de un solo uso. Todas sus marcas utilizan platos, vasos y cubiertos biodegradables, disminuyendo significativamente la contaminación asociada al consumo de alimentos.
Este esfuerzo, alineado con las mejores prácticas globales de sostenibilidad, reemplaza materiales tradicionales por opciones amigables con el planeta y fomenta hábitos más responsables entre consumidores y colaboradores.

6. Prevención del desperdicio de alimentos
A través del programa Al Rescate, en alianza con BAMX, GRG logró recuperar alimentos en perfecto estado para destinarlos a organizaciones que apoyan a personas en situación vulnerable.
En 2023, Panda Express rescató 529 kg de alimentos y Shake Shack 4,676 kg, lo que permitió donar 17,351 comidas a 8 fundaciones y 4 bancos de alimentos, además de contribuir a la reducción de emisiones asociadas al desperdicio, mejorar la seguridad alimentaria de grupos vulnerables y contribuir a la consolidación de un sistema de consumo más consciente.

Un modelo de responsabilidad que transforma
La suma de estas acciones demuestra que Grupo Restaurantero Gigante no solo opera bajo principios ASG, sino que los convierte en una estrategia integral capaz de generar impactos positivos en el ambiente, en sus colaboradores y en las comunidades del país. Desde el fortalecimiento de cadenas productivas hasta la reducción de residuos y la restauración ambiental, el grupo ha construido un enfoque sólido y coherente que impulsa una transformación profunda en la industria restaurantera.
El liderazgo de Grupo Restaurantero Gigante se evidencia en su capacidad de innovar, adoptar buenas prácticas globales y desarrollar programas que generan valor compartido. En una época en la que los sistemas alimentarios enfrentan enormes desafíos, GRG demuestra que es posible operar con responsabilidad, fortalecer el bienestar de las personas y contribuir al cuidado del planeta mientras se mantiene un modelo de negocio exitoso y sostenible.







