Después de 17 meses sin alzas, la cadena de cafeterías Starbucks elevó el precio de todo su portafolio de bebidas y alimentos en alrededor de 3 por ciento, equivalente a un peso en promedio.
Desde el 27 de julio, la firma aplicó el alza en precios en las más de 476 cafeterías que opera a nivel nacional.
No obstante, dejó en claro que el incremento no aplicará a la venta de café en grano y mercancías diversas, como termos y tazas.
«Este ajuste es resultado de un balance del costo operativo de la compañía, incluyendo los precios de nuevos productos e incremento de costos en los diferentes insumos, bajo dinámicas competitivas en el mercado», dijo la empresa.
No obstante, agregó que Starbucks absorbe el mayor porcentaje de este balance.
«Sólo se traslada una mínima parte (del incremento en el precio de los insumos) al consumidor, para mantener la garantía de calidad en el servicio», agregó.
De acuerdo con reportes financieros de Alsea, operadora en México de Starbucks, los insumos que más pesan en la estructura de sus costos son el café y la leche.
La última vez que Starbucks había incrementado sus precios fue en febrero de 2014, un mes después de que entró en vigor la reforma fiscal que gravó a alimentos y bebidas con alto contenido calórico.
En noviembre de 2013 había aplicado un incremento similar al de este 2015, también por razones inflacionarias.
La firma no contempla nuevos movimientos de precios durante lo que resta del año, puesto que Alsea prevé un mejor entorno en el consumo y resultados positivos de sus estrategias para incrementar eficiencias en costos, según expusieron sus directivos en su más reciente conferencia trimestral con analistas del mercado.
Fuente: Negocios Reforma
